Bajo la autoría de Marcelo Cotton y luego de muchos años, se estrenó, en versión libre de Daniel Casablanca, Diego Reinhold y Guadalupe Bervih "Argentina al diván". Este proyecto que arrancó en la radio trata de una forma muy original la historia argentina desde 1810, pero lo divertido de la propuesta es que la propia Nación acude a terapia.
En un diálogo agudo, voraz y muy inteligente se retratan los hechos que nos han sucedido y los diferentes "personajes" que nos formaron o desformaron como sociedad.
La obra, donde claramente se nota el ojo de estos artistas, quienes adaptaron esos hechos relatados por Marcelo, adopta un tono más actual si cabe. En mi caso, me llevó unos minutos posicionarme en que esa mujer aturdida que interpela entre el público comenzada la función, con un monólogo de Diego, es nuestro sufrido país, un logradísimo momento del inmenso y carismático Daniel Casablanca.
Ambos artistas sacan todas sus aristas y las potencian, Diego con esa verborragia típica en él, ideal para devorar el texto y darle una agilidad que no nos da tiempo de terminar de reír para volver a hacerlo. Daniel esta apabullante, natural y es imposible sacar la vista de él, una actuación que hace recordar a esos capos cómicos de antes que ya no se encuentran. La alquimia de los dos es magnífica, cada uno de ellos con su propia marca e impronta.
La dirección de arte es de Analía Morales, la escenografía y la musicalización están muy logradas, siendo el diseño escenográfico de Analía y realizada por Marcos Aquistapace y es muy funcional a la obra sin ser grandilocuente y la música de Tomás Rodriguez, apropiada para la obra y realzando cada momento y protagonista en la parte final con un cuadro inolvidable y emotivo.
"Argentina al diván" con una impecable dirección de Guadalupe Bervih es una obra muy inteligente, ágil, que merece más de una visión por todos sus detalles y con dos artistas que la rompen literalmente en escena.
GUSTAVO SCUDERI